Guatemala se suma a los países de la región en los cuales se mantiene la alerta por la presencia de la influenza aviar en la región.
El médico veterinario Julio Cordón, director del Programa Nacional de Sanidad Avícola (Prosa), del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA), brindó a Prensa Libre una perspectiva sobre el caso de influenza aviar detectado en Guatemala, así como el mecanismo que se está rigiendo a las medidas establecidas por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA).
El técnico confirmó que la enfermedad que afecta a la población aviar esta contralada en Guatemala y que se mantienen un plan de contingencia. El pasado 14 de febrero se oficializó la presencia de la enfermedad al encontrarse pelicanos infectados en la desembocadura del río Motagua y derivado de esto Guatemala se declaró en estado de emergencia zoosanitaria.
La zona en vigilancia es en el municipio de Puerto Barrios y Livingston, en Izabal y constantemente las brigadas están realizando las verificaciones en el área, para garantizar que no hay más casos.
El área de monitoreo son los traspatios, con una población estimada de 10 mil aves en el municipio de Puerto Barrios. De momento no hay avistamiento de aves muertas en el litoral, que comprende desde la desembocadura del río Motagua, hasta la desembocadura del río Sarstún.
Hasta el momento no hay más casos positivos, afirmó el especialista, aunque hay un foco en el municipio de Cortés, Honduras. Esta es la entrevista que Julio Cordón, el encargado de Prosa brindó para responder las dudas de los guatemaltecos:
¿Qué es la enfermedad Gripe Aviar N5H1?
La influenza aviar en sus diferentes subtipos, porque hay H1 hasta H16, y la neurominidad va desde la N1 hasta la N9. Las aves silvestres migratorias, es decir las aves que vienen desde Canadá y Estados Unidos, son portadoras de estos virus, en su aparato respiratorio y aparato digestivo.
En su paso por Guatemala hacia América del Sur, tuvieron contacto con estas aves silvestres en el litoral, y fue ahí donde se enfermaron. Básicamente, las aves silvestres acuáticas, son las que son muy susceptibles y en este caso los pelicanos.
¿Qué se tiene que hacer?
Tenemos que evitar el contacto de estas aves silvestres con las aves de corral, para evitar que la enfermedad se difunda. Esto se debe a que las aves de corral son susceptibles al virus y se pueden contagiar con la enfermedad.
Por ello, al detectarlo, se procedió a enterrar los 11 pelicanos que encontramos muertos en el mismo sitio. Creemos que el riesgo existe, porque es posible que haya otras aves enfermas en la frontera que tenemos con Honduras.