El pontífice argentino, de 86 años, dio una última misa antes de cerrar la mayor reunión internacional de católicos
Frente a una marea de 1,5 millones de peregrinos, el papa Francisco presidió el domingo la misa final de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) de Lisboa, donde pidió a las nuevas generaciones que no tengan miedo e hizo un llamado por la paz.
Aclamado por una multitud que le cantaba “¡Esta es la juventud del papa!”, el pontífice argentino, de 86 años, se dio un último baño de masas antes de cerrar esta edición de la mayor reunión internacional de católicos.
“A ustedes jóvenes que quieren cambiar el mundo (…) y que quieren luchar por la justicia y la paz (…), no tengan miedo“, lanzó Francisco en español, durante una ceremonia en la que también se acordó de las zonas en conflicto.
“Siento un gran dolor por la querida Ucrania, que sigue sufriendo tanto. Amigos, permitan que también yo, ya viejo, comparta con ustedes un sueño que llevo en el corazón, el sueño de la paz“, agregó el líder espiritual de los 1.300 millones de católicos.
Tanto en la vigilia del sábado como en la eucaristía del domingo, en este vasto recinto instalado junto al Tajo se congregaron 1,5 millones de personas, informó el Vaticano citando una estimación de las autoridades portuguesas.
Tras dormir al raso en una cálida noche de verano, los jóvenes se despertaron al ritmo de la música que pinchaba un cura-DJ portugués desde el gigante escenario que recordaba al de un macrofestival, mientras amanecía un día en el que las temperaturas llegaron a rozar los 40 grados.
Queridos jóvenes, Dios ve todo lo bueno que ustedes son y sólo Él conoce lo que ha sembrado en sus corazones. Háganlo crecer, cuídenlo con esmero, para que cuando lleguen los inevitables momentos de cansancio y de desánimo, con el recuerdo reaviven la gracia de estos días. #JMJ
— Papa Francisco (@Pontifex_es) August 6, 2023
“Estas jornadas son una forma muy linda de sentirse empoderado por toda la comunidad“, indicó Maricruz Linares, una diseñadora digital de 25 años llegada desde Costa Rica. “Es impresionante encontrar a tanta gente que piensa como uno”, agregó.
Al “lejano oriente”
Después de un extenso recorrido en “papamóvil”, Francisco presidió la misa desde el colosal altar que dominaba este recinto a las puertas de Lisboa repleto hoy de fieles agitando sus banderas, además de 10 mil sacerdotes, 700 obispos y 30 cardenales.
“Es extraordinario poder estar aquí para ver a nuestro papa Francisco, que consigue unir a personas de todo el mundo”, celebró Pimentel Gomes, un cura brasileño de 52 años.
Antes de concluir la ceremonia, Francisco desveló una de las incógnitas de cada edición, al anunciar que Seúl será la próxima sede de este macroevento que moviliza a miles de jóvenes de todo el mundo.
El Papa se despide de Lisboa y vuela ya hacia Roma, tras cinco días con los jóvenes de la JMJ. Este ha sido el cuadragésimo segundo viaje apostólico del Papa Francisco y el segundo a Portugal https://t.co/zi6sbsTULv
— Europa Press (@europapress) August 6, 2023
“Y así, en el 2027, desde la frontera occidental de Europa se trasladará al lejano oriente, y este es un hermoso signo de la universalidad de la Iglesia“, reveló, mientras un grupo de peregrinos de este país donde alrededor del 11% de la población es católica festejaban en el altar.
📷 FOTO DEL DÍA | El Papa Francisco se despide de la #JMJ #Lisboa2023 rezando a los pies de la imagen original de la Virgen de Fátima, traída directamente del santuario.
En la #JMJ #Seoul2027, el Santo Padre será un joven de 90 años. ¡Oremos por él!
Crédito: Vatican Media pic.twitter.com/8Ntl11A1fg
— ACI Prensa (@aciprensa) August 6, 2023
Después de la misa, el papa se encontró con los 24 mil voluntarios que participaron en la organización de esta edición de la JMJ, aplazada un año a causa de la pandemia, antes de emprender el regreso a Roma.